En esta novela tan conocida, dos muchachos de procedencia humilde se marchan de sus casas para conocer el mundo. En una ciudad donde pretenden poner en práctica sus trucos para robar se encuentran con un hombre que les guía hasta la hermandad de Monipodio. Ésta es una hermandad de ladrones que se ayudan los unos a los otros y se reparten el beneficio de las cosas robadas y los encargos que les hacen, pero aun así, si rezan todos los días, cuentan con ir al cielo. Al principio les gusta mucho esa vida, pero luego se dan cuenta de que no es honrada y que les podría acarrear muchos problemas, así que se despiden de todos sus amigos ladrones y se van para seguir sus vidas por el buen camino. Me ha gustado este libro porque al final se dan cuenta de lo que están haciendo mal y se arreglan a sí mismos para no engañar más a nadie.
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