Arnau Estanyol no era más que un recién nacido cuando escapó junto a su padre de la tiranía del señor de Narvacles. Juntos huyeron a Barcelona para alcanzar la libertad mientras que se escondían en la casa de unos familiares, donde no fueron muy queridos. La vida de Arnau no fue fácil, apenas tenían para vivir y su padre, al que apreciaba mucho, murió siendo él muy joven. A pesar de todas las dificultades Arnau sigue adelante respaldado siempre por su querida iglesia Santa María del Mar.
Es un muy buen libro. Su protagonista es bondadoso y amable, y eso hace que sufras casi con la misma intensidad que él mismo sus desventuras y dichas. Además, enseña mucho acerca de la vida en la España medieval.